Sufrió su saña y desahogo.
Sus lágrimas se deslizaban día y noche por su mejilla caliente.
Sintió pena, dolor, angustia y un rechazo absurdo y la traición se apoderó de sus fuertes palabras, palabras tan duras como el acero, palabras tan fuertes como un puñetazo en la cara, palabras tan sinceras como el primer beso.
Ella calla y sufre, pero no habla. Nadie pregunta nada, nadie dice nada.
Él intenta olvidarlo, quiere volver a confiar.
Como dijo una persona, " una relación, sea del tipo que sea, se contruye entre dos".
Él la necesita. ella le necesita, cículo vicioso con triste final.
Diciembre 2008
jueves, 20 de mayo de 2010
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